Teatros y academias que abren sus puertas para bailarines
En el barrio Armenia de la localidad Teusaquillo se encuentra La Otra Guarida, un espacio independiente fundado en el año 2014 para impulsar la creación, la formación y la circulación de las artes escénicas. En Chapinero está la compañía Chochaviva La Academia, un lugar dedicado al entrenamiento y la programación de ensayos para bailarines de toda la ciudad. Y en Modelia se ubica D´Corrinche Pa’Bailar, una academia enfocada en la transmisión de expresiones culturales a través del cuerpo y el movimiento.
Estos son tres de los escenarios que este año abrieron sus puertas para que los residentes temporales de Orbitante Plataforma Danza Bogotá puedan desarrollar sus proyectos creativos en los lenguajes urbanos, tradicionales, contemporáneos, clásicos y populares, entre otros, al tiempo que reciben acompañamiento del Instituto Distrital de las Artes – Idartes en temas de producción audiovisual y técnica, investigación, entrenamiento, dramaturgia, coreografía y otros temas relacionados con sus proyectos específicos.
En la lista también se encuentra el Teatro Villa Mayor, un equipamiento cultural de la Alcaldía Local de Antonio Nariño que se ha consolidado como un epicentro de promoción artística y divulgación del conocimiento para el sur de Bogotá, donde se acogen todos los lenguajes dancísticos.
Además de estos espacios aliados, La Casona de la Danza recibe todos los días a los bailarines que hacen parte de los diferentes proyectos de Orbitante. Este es un equipamiento cultural del Idartes que está destinado al desarrollo de las prácticas y apropiaciones artísticas en una infraestructura adecuada para ensayar, crear y formar. Es un edificio de dos plantas, cinco salones, pisos de madera y una excelente iluminación, que se ha convertido en un centro que contribuye a la generación de oportunidades para los agentes del sector.
El Idartes también tiene a disposición el Salón de los Espejos del Teatro Jorge Eliécer Gaitán, un lugar especial para la práctica de la danza y las artes escénicas, que se encuentra adecuado con piso de madera, espejos de cuerpo entero y barras de ballet. También hacen parte de estos espacios de creación el Teatro El Ensueño, con una capacidad para 800 personas, diez camerinos, dos salas de ensayos, una arquitectura innovadora y alta tecnología que permite la presentación de obras, conciertos y propuestas de gran formato.
“Desde el Idartes hemos emprendido esta articulación con distintos espacios de Bogotá para fomentar la práctica creativa de la danza y acoger a los participantes en la línea de residencias de Orbitante. Nos complace que bailarines de la ciudad puedan desarrollar sus proyectos creativos en estos escenarios públicos y privados, donde hay variedad de horarios, capacidad y aspectos técnicos que responden a las necesidades específicas de cada proceso”, destaca María Paula Atuesta, gerente de Danza del Idartes.